La Revolución Mexicana fue un conflicto armado que comenzó en 1910, en respuesta a décadas de desigualdad social y dictadura bajo Porfirio Díaz, quien había gobernado México por más de 30 años. La revolución se desencadenó cuando Francisco I. Madero, un reformista liberal, llamó a una rebelión contra Díaz tras un proceso electoral fraudulento.
Antes de pasar al mapa conceptual de la Revolución Mexicana, repasemos sus características.
Características de la Revolución Mexicana
El movimiento revolucionario se caracterizó por la participación de diversos líderes y facciones con objetivos distintos, entre ellos Emiliano Zapata, que luchaba por la reforma agraria y el reparto de tierras, y Pancho Villa, conocido por sus tácticas guerrilleras en el norte del país.
Tras la renuncia de Díaz en 1911, el país se sumergió en una guerra civil prolongada, con enfrentamientos entre facciones revolucionarias y contra fuerzas conservadoras. A lo largo de los años, la revolución derivó en cambios significativos, como la promulgación de la Constitución de 1917, que introdujo reformas agrarias, laborales y educativas.
La Revolución Mexicana fue un proceso complejo que transformó la estructura política y social del país. Aunque no resolvió todos los problemas, sentó las bases para un México más justo y moderno, influyendo profundamente en la cultura y la identidad nacional.