La evolución del hombre es un proceso que se extiende a lo largo de millones de años y se caracteriza por cambios en la anatomía y el comportamiento de nuestros antepasados. Se basa en la teoría de la evolución de Charles Darwin y se respalda con evidencia fósil y genética.
Antes de pasar al mapa conceptual de la Evolución del Hombre, repasemos sus características.
Características de la Evolución del Hombre
Hace aproximadamente 7 millones de años, nuestros antepasados compartían un ancestro común con los chimpancés. A lo largo del tiempo, se produjeron transformaciones anatómicas clave. Nuestros antepasados se erguían sobre dos patas, lo que liberaba sus manos para tareas complejas. El desarrollo del cerebro se aceleró, permitiendo la capacidad de pensamiento y comunicación avanzados.
Hace unos 2 millones de años, aparecieron los primeros homínidos, como el Homo habilis, que utilizaban herramientas de piedra. El Homo erectus, hace 1.9 millones de años, mostró una expansión geográfica significativa y evidencia de control del fuego. Hace unos 200,000 años, surgieron los Homo sapiens, nuestra especie, en África.
La capacidad de razonar, comunicarse y colaborar permitió a los Homo sapiens desarrollar sociedades complejas y tecnología avanzada. Migraron por todo el mundo, adaptándose a diversos entornos y creando culturas diversas.
La evolución humana también se refleja en la diversidad genética. Las diferencias genéticas entre las poblaciones humanas se originaron en la migración y la adaptación a diferentes entornos. La genética también revela nuestra relación con otros homínidos, como los neandertales y los denisovanos, con quienes compartimos ancestros comunes.